Dejé mi vida en la ciudad para vivir cerca de la mar. Durante los últimos años he vivido un proceso intensivo de reevaluar mis prioridades que me ha llevado a transformar mi modo de vivir en uno diseñado para mi plenitud. Hoy, creo enteramente que la vida es arte y que unx tiene la capacidad de modelar la propia realidad tal como la arcilla. 

En esta nueva etapa de mi vida, la Antigimnasia ha sido una gran acompañante y guía, reflejo de esa vida que empecé a crear. La precisión, rigurosidad y sutileza de este método me inspiran a conocer y utilizar mejor mi cuerpo cada día, a expandir el concepto de “autonomía” a diferentes espacios y aspectos en mí, conectándome de forma más precisa con mis proyectos y propósitos. 

Una sesión conmigo

En mis sesiones, busco integrar la sensibilidad que me ha dado mi camino en las artes visuales y escénicas con la precisión y minuciosidad de la Antigimnasia. Tanto para el espacio virtual como para el presencial, preparo cada sesión buscando transmitir claridad y armonía. Puedes tener la confianza de que recibirás toda mi atención y mi cuidado, y que cada sesión será una nueva oportunidad para descubrir más de ti mismx y de tus posibilidades de movilidad, bienestar y autonomía.

Presencial, cerca al mar
Doy sesiones en CAMP, un centro de retiros y arte en la playa Zipolite, en el Pacífico mexicano. Este es un lugar construido para el bienestar, la creación artística, el contacto con la naturaleza, la autonomía y el descanso. Vivir una sesión aquí es obsequiarse un momento de recogimiento, refugio y placer. 

Virtual, para tu facilidad

Gracias a las características de este método, es muy fácil practicar Antigimnasia de forma virtual entre otras cosas porque no hay contacto físico y los movimientos se transmiten únicamente de manera verbal.